No esperes nada de nadie...
porque nunca llegara.
No esperes esas promesas hechas en el pasado...
porque ya se rompieron desde que las hicieron.
No esperes que las cosas te sean regaladas...
porque te han de costar con sangre.
No esperes la alegría de la vida...
porque puede llegar o huir inesperadamente.
No esperes levantarte cuando te caigas...
porque volverás a caerte.
No esperes cumplir tus metas de la vida...
porque no siempre han de realizarse.
No esperes cosas que crees merecer...
porque no siempre son para ti.
No esperes a que las cosas cambien...
porque pueden empeorar.
No esperes que el amor toque a tu puerta...
te va a costar buscarlo.
No esperes a la muerte...
porque temerle no evitara que venga por ti.
No esperes...