viernes, 7 de mayo de 2010

Sueños de muerte

El primer impacto fue directo a mi pulmón derecho, de ahí ocasiono un orificio de salida por la espalda incrustándose en la pared, el segundo fue a parar a mi corazón, ese se alojo atrás del mismo, siendo detenido por una vértebra.


La muerte no fue tan instantánea como pensaba, todavía tuve tiempo de ponerme una mano en el pecho, ver mi propia sangre y caer de espaldas contra la pared, recargado mientras la poca vida se iba a través de una hemorragia y un corazón herido.


El final viene cuando caigo de lado, los latidos se han detenido, me desangro rápido y un charco rojo empieza a formarse, mancha el piso blanco y la pureza del mismo se ve violentada por mi muerte.


Morir no es como uno piensa, el dolor es algo extraño, no siento sufrimiento como cuando me corto o me golpeo, esto es diferente, es algo que solo en sueños he probado y que siempre se ha escapado de mis manos.


Ya no hay palabras que expresar, solo una conciencia que espera a dormirse y despertar de ese sueño, porque la muerte es la liberación de la vida misma.


La escuela no volverá a ser la misma, el sonido de la muerte la ha marcado, dos casquillos calibre cuarenta y cinco son testigos de mi final. El día será gris, la lluvia caerá durante todo el día y mañana hará frío, la muerte nunca ha sido cálida y siempre causara dolor.


Justo antes de partir se escucha lo que esperaba, unos pasos, gritos y una llamada a emergencias.


Despierta...

1 comentario:

Meli dijo...

oaww... Amo tus escritos, tus poemas... enserio, me encantan... ♥